Unidad de las trabajadoras
Organizado en conjunto entre Ate Rosario, la Fundación Rosa Luxemburgo y el SOEAR, tuvo lugar la tercera edición del Encuentro Nacional de Feminismo Sindical. Nuevamente fue Rosario la ciudad anfitriona y las jornadas discurrieron en la sede gremial de ATE Rosario y la del SOEAR. En el plenario participaron alrededor de 100 compañerxs de diferentes puntos del país y la mayor riqueza estuvo en la diversidad del entramado porque hubo representantes de gremios diversos y de todas las centrales sindicales. La construcción desde las bases de un sistema integral de cuidados y la necesidad imperiosa de las trabajadoras de imponer el tema en la agenda pública. El debate acerca de las estrategias que se vienen tramando desde el colectivo de mujeres y diversidades de cara a la compleja coyuntura nacional, las políticas de ajuste, el avance de la derecha, el recrudecimiento de la represión y la criminalización de la protesta. Estos fueron algunos de los ejes que sobrevolaron las dos jornadas de intensa actividad que se desarrollaron el viernes 30 de junio y sábado 1 de julio en el marco del III Encuentro Nacional de Feminismo Sindical. Un elemento recurrente en las intervenciones e intercambios: nadie se salva en soledad. En esta nota, las voces de las organizadoras.
El Encuentro de Feminismo Sindical ya se volvió una referencia para el colectivo de mujeres y diversidades de nuestro país. Un espacio necesario de debate, reflexión y acción. ¿Cómo las encontró la tercera edición del Encuentro Nacional de Feminismo Sindical?
Florencia Puente (Coordinadora de Proyectos de la Fundación Rosa Luxemburgo, Oficina Cono Sur) – Estamos muy contentas de tener ya un tercer Encuentro Nacional y además de que hayamos podido tener espacios de encuentro temáticos para discutir cuestiones puntuales, como el año pasado que discutimos a pleno el sistema integral de cuidados y qué significaba eso para las trabajadoras. Este año con varias compañeras pudimos tener presencia en el debate legislativo, hubo una sesión especial abierta para discutir con trabajadoras qué supondría un sistema integral de cuidados. Creo que el haber tenido en la previa nuestros debates nos puso muy en contexto de lo que teníamos que pensar en ese marco. De hecho en este plenario lo que estamos discutiendo es cómo seguimos pensando propuestas desde las trabajadoras hacia un sistema integral de cuidados, cuando sabemos que hoy el debate legislativo tiene múltiples crisis, de hecho el debate hoy está paralizado. Somos nosotras las que vamos a poder poner en agenda nuestras demandas.
En relación al Tercer Encuentro Nacional, desde la Fundación Rosa Luxemburgo estamos muy contentas de que nos vuelva a encontrar en alianza con ATE Rosario y el SOEAR. Creemos que es un espacio que va tomando forma de manera autónoma, ya las compañeras se sienten convocadas porque sienten identidad con el espacio y eso es un montón. Hemos ido construyendo colectivamente las estrategias como feministas y como sindicalistas, habitando estos dos espacios al interior de nuestros espacios de trabajo y en relación con la actual coyuntura nacional. No sólo hay crisis en el plano de los bates políticos nacionales, sino también al interior de los sindicatos donde la situación de las mujeres feministas es mucho más compleja en el momento de reflujo que vive el feminismo. Para nosotras es cada vez más central sostener este espacio de coordinación intersindical. Y sostenerlo con todas adentro, con compañeras de todos los espacios y de todas las centrales sindicales.
Lorena Almirón, Secretaria General de ATE Rosario – Valorar muchísimo que hayamos sido facilitadoras de este Encuentro, tanto las mujeres y diversidades de ATE como también las del Sindicato de Aceiteros. En el Encuentro queríamos la diversidad de sectores. Lo importante es poder debatir. Está todo más consolidado que el primer encuentro en el que éramos apenas un puñadito de mujeres. Fue el segundo Encuentro que se hace acá en Rosario y tuvo una diversidad bastante importante de sindicatos con compañeras que vienen participando del movimiento de mujeres y diversidades y del movimiento feminista. Es un orgullo que las compañeras estén acá. Con participación de compañeras de la economía popular (UTEP), además de la CTA Autónoma está la Central de los Trabajadores, compañeras de la CGT, del Movimiento Sindical Rosarino. Entre las mujeres y diversidades nos podemos juntar de otra manera a pesar de que tenemos diferencias. Que se pueda debatir es muy importante, es necesario.
Entendemos que el sindicato tiene que ser feminista, hay que romper con las estructuras patriarcales históricas del sindicato. Viene un impulso de hace muchos años que no lo empezamos nosotras ni nosotres. Las históricas les decimos a quienes impulsaron esto, pero es importante sostener la continuidad. Lo transversal de todo este encuentro es lograr la intersindicalidad. Y lo estamos logrando en muchos espacios, creo que fue una muestra la marcha que hicimos contra la violencia y las balaceras. En nuestra ciudad venimos trabajando muy fuerte con las mujeres sindicalistas, hemos formado una intersindical por la Ley Micaela, hemos incidido en la política pública cuando presentamos el Proyecto de Comunicación porque hasta ese momento no se había pensado en que los sindicatos tenían que ser los encargados de llevar adelante la Ley. Hoy hemos proporcionado a las compañeras y compañeros un espacio dentro del sindicato para que puedan hacer el curso de la Ley Micaela, hemos conformado un gabinete para dar apoyo, respuesta y acompañamiento para llevar adelante esa capacitación.
Carina Savone (Sub-Secretaria de Género del SOEAR) – Este Encuentro deja una sensación doble, por un lado linda, y por otro lado fea. Hay logros conseguidos en algunos sindicatos y no en otros. Lo bueno es que se puede desglosar lo conseguido y lo faltante. Si aquel sindicato lo consiguió, nosotras lo podemos conseguir por este lado. Nos falta muchísimo, hay muchas mujeres que están fuera de los sindicatos o que no tienen un sindicato que las acompañe. Por ejemplo, las mujeres de los comedores trabajan día y noche llevando el alimento a los chicos de los lugares más alejados de la ciudad. Ellas están juntas pero no tienen alguien que las represente. Si bien está la CTA no tienen la unión entre comedores para hacerse más fuertes. Faltan muchísimas cosas.
¿Qué se viene planteando como horizonte en la construcción del sistema integral de cuidados?
Florencia Puente – Como Fundación tenemos una mirada y después cada compañera desde su espacio de organización tiene la propia y eso es lo que valida este espacio. Es complejo porque el sistema integral de cuidados va mucho más allá de lo que hoy se está proponiendo legislar que es básicamente una ampliación del sistema de licencias. La propuesta que hizo el año pasado el legislativo es muy interesante en su marco legal porque es verdaderamente integral y se pone en reconocimiento, por ejemplo, a las trabajadoras de la economía popular y la doble y triple jornada laboral. Pero cuando eso aterriza en el plano legislativo vuelve a ser lo mismo: una ampliación del sistema de licencias. Pensando en el mejor escenario actual, que es que logremos la ampliación del sistema de licencias, eso supone un desafío para las mujeres feministas porque muchas veces la ampliación de las licencias pone en pausa nuestra vida política y nuestra vida sindical. Eso es algo que siempre debe estar complementando con otras estrategias de las mujeres y de los feminismos en los espacios de trabajo. Vemos una disociación grande entre un sistema integral que supone una presencia fuerte en términos institucionales y de presupuesto del Estado para impulsar las diferentes esferas.
Lorena Almirón – En el SOEAR hubo una charla sobre las tareas de cuidado, hay infinidad de proyectos que se han presentado a nivel nacional y provincial, pero ninguno se ha aprobado. Para nosotras es fundamental que se debata el tema de cuidado. Seguimos perdiendo tiempo, es fundamental para todas las mujeres y para las organizaciones sociales. Todas las tareas de cuidado tienen que ser reconocidas y remuneradas. Hasta ahora eso no es un hecho.
Hay muchas leyes donde hemos sido protagonistas las mujeres pero muchas no se llevan a la práctica. Entonces hay que hacer un monitoreo, como fue la Ley de Cupo Trans o la Ley de Licencia por Violencia de Géneros y Diversidades. Esas cuestiones tienen que ver con luchas históricas del movimiento de mujeres y cuesta mucho que se llevan a la práctica y que haya presupuesto de los gobiernos para poder implementarlas. Lo más importante es lograr la intersindical para trascender en la política, incidir en la política pública. Hay muchos logros pero mucho por delante, muchos desafíos, como por ejemplo, que se pueda dar en todas las escuelas la ESI o la Ley Vanesa.
Carina Savone – Se charló también sobre el decreto 144/22 que plantea la obligatoriedad del empleador de contar con salas maternales y guarderías. Tiene muchos grises el decreto, muchos puntos a discutir, como por ejemplo, el mínimo de cien empleadxs por fábrica. Hay muchas pymes que tienen hasta noventa y no pueden gozar del beneficio de la guardería. También se habló de la extensión, es hasta los tres años y después no tenés dónde llevar a la criatura. El decreto debería extender la edad. Se calcula el 40% del sueldo de una empleada de casas particulares. Con ese 40% no llegás a cubrir el gasto si tenés que dejarlxs en una guardería particular. Hay que tratar de ampliar ese piso. Por otro lado, hay que poder saber en qué lugar estás dejando a tus hijos, no sabés qué le están inculcando en una guardería paga por la empresa.
¿Cómo encuentra al feminismo sindical el contexto nacional de ajuste y represión que recae con mayor fuerza sobre este colectivo organizado de mujeres y diversidades?
Florencia Puente – Este año el espacio de este Encuentro de Feminismo Sindical se activó a partir de los despidos de Clarín. Como mujeres trabajadoras feministas tenemos que pensar en respuestas frente a situaciones que son el inicio de una nueva etapa. Vimos que lo que estaba pasando con los despidos en Clarín iba a ser moneda corriente si había un cambio de signo político y frente al escenario actual de endeudamiento y crisis generalizada. Eso nos pone en alerta, en general veníamos trabajando temas más específicos ligados a la violencia, cuidados y participación de las mujeres en sectores masculinizados. Pero teníamos que dar el debate acerca de nuestra situación como mujeres feministas sindicalistas frente al escenario actual para las trabajadoras y el mundo del trabajo.
Hay una compañera de Jujuy que nos vino a acompañar y que está atravesando la crisis y la represión. No es menor hacer un encuentro en el contexto en que tenemos una provincia que está en llamas. Sabemos que la derecha no sólo refrendó la represión de Morales sino que fue más allá de él, dejando en claro cuáles van a ser las políticas de todo el arco político de derecha, no sólo de Morales y el larretismo, frente a una situación como la que está sucediendo hoy en Jujuy. Frente a eso pensar colectivamente estrategias políticas para no sólo defendernos sino para contraproponer y contrarrestar esa situación. Creemos que la solidaridad entre las compañeras de las comunidades indígenas, el mundo del trabajo y en general las organizaciones urbano-populares de Jujuy fue impresionante para lograr el nivel de resistencia que están sosteniendo. Más allá de que haya salido de la agenda mediática, hoy Jujuy sigue activo y en resistencia. Tenemos que encontrar formas desde el mundo del trabajo para acompañar esos procesos.
Lorena Almirón – El objetivo general del Encuentro era generar propuestas para ir contra el ajuste y la represión hacia las trabajadoras y los trabajadores. Siempre es más fuerte hacia las mujeres la represión, la persecución y la violencia política. Es un momento muy duro para la Argentina. Hay un avance de la derecha. No queremos un gobierno neoliberal, hemos tenido y hace muy poco, y significó deuda, despidos y la estigmatización de todos los trabajadores. Parece que odian a los trabajadores y a los sindicalistas. Argentina es un país donde hay mucha afiliación a los sindicatos. Durante la pandemia se afiliaron 500 personas a ATE Rosario. Vamos a hacer todo lo posible para que los sectores de la derecha no avancen. Para eso tenemos que tener propuestas de trabajo y unificar todo lo posible los sectores, no desde la política partidaria sino desde las bases para incidir en la política. Ese es el desafío que tenemos por delante.
Carina Savone – En Argentina estamos próximos a elecciones. Se habló el tema político en el Encuentro, tema Jujuy, el femicidio en Salta, en Misiones los docentes están acampando hace una semana por paritarias. Esta globalización deja mucha gente afuera. Si bien estamos avanzando con algunos derechos, en otros derechos estamos retrocediendo. En Jujuy están tapando el tema del extractivismo del litio. Esto va a seguir porque no se resuelve dándoles un aumento a los maestros. El resto de los gremios y las demás personas que viven en Jujuy tienen sueldos bajísimos. Lo que pasa en Jujuy es un ensayo, si sube la derecha van a ir por más. Es lo que ellos quieren: terminar con las marchas, que la gente no salga a la calle, sacar derechos. Vienen por todos los derechos que hemos adquirido durante tantos años. Sola no se salva nadie. Si no nos unimos, nos hundimos.